Crónicas Saloneras (SdM'10) - Parte 2 de 2

El día sábado fue algo más peliagudo que el día anterior precisamente porque todos aquellos que no pueden ir el viernes porque tienen clase o trabajan, deciden hacerlo en festivo.

Así pues, me levanté temprano, así aprovechaba que mi hermana bajaba a Barcelona para ir yo también. Llegué a L'H sobre las 8:50~9:00, y me puse a la cola de entrar. Por suerte no había "demasiada gente" todavía y lo que es la calle que sube (Girona), me quedé a la esquina. En cuestión de media hora había avanzado algo, cosa rara teniendo en cuenta que cada vez más gente va colándose "legalmente", lo que la cola debería tender a expandirse y no a contraerse. Misterios del Salón...

Sobre las 9:50 llegó un amigo mío y lo colé "legalmente". A las ~10:00 llegó otra amiga a la que colé "legalmente", también. Tanto mi amigo como yo llevábamos la bata puesta de casa, mientras que nuestra amiga aprovechó que la cola avanzó hasta un sitio más ancho para ponérsela. La cola avanzaba sin más problemas y entramos al recinto, también, sin ningún percance digno de mención.

Una vez dentro comenté que si queríamos comer ahí deberíamos ir a buscar los tickets, para ya tenerlos. Dijeron que en el futuro comeríamos pastillas; era mentira. En realidad comemos papel. Los tickets no deben perderse bajo ningún concepto. Total que pillamos los tickets haciendo poca cola, porque únicamente la gente inteligente sabe pensar cuando hay que pensar. Después de eso subimos a la habitación de videojuegos, y mis amigos porbaron el Kinect. Yo pasé porque como seguramente en un futuro medio me lo voy a comprar, pues ya lo probaré cuando lo tenga. Después mi amigo probó el Dragon Age: Origins y mi amiga un juego de Star Wars the Clone Wars. Al cabo de un rato yo también probé el de Star Wars, en modo cooperativo; al final acabamos jugando mi amigo y yo. Después desayuné e hice las fotos panorámicas de rigor. Serían las 12 o por ahí.





Para mi sorpresa, el Salón estaba "lleno", sobre todo la parte de los lavabos y bajo las escaleras y algún pasillo. El resto era transitable. No fue, ni por asomo, como hace dos años en que no dejaban entrar de lleno que estaba, y si salías no podías volver a entrar. Es cierto que costaba algo moverse, pero ciertamente, he vivido tiempos mucho peores.

Al cabo de un rato de pasear contactamos con cierta persona, y al final acabamos viendo la presentación de I Love Tokyo, pues sus autoras fueron monitoras del esplai donde mi amigo es monitor. Agradecí estar sentado un rato. Después fuimos al stand de Norma para ver a qué hora empezaba la sesión de firmas (de 16:30 a 18:00). Después fuimos a comer. Al principio estábamos amontonados esperando el ramen de pote (caro por cierto, 4 napos), pero cuando mi amiga propuso repartirnos, fuimos más rápido (los méritos también hay que reconocerlos). Salimos del recinto y nos acercamos al centro comercial y en unos bancos exteriores comimos.

Tras un ligero descanso entramos al centro comercial a por agua, y nos pasamos por un Game. Al salir vi a un chico desfrazado de Perry, el Ornitorrinco.

¿Eh? ¿Dónde está Perry?

Ah!, ahí está:



Volvimos al recinto en sí y fuimos a la sesión de firmas de Norma. Mi amigo se compró el 25 de FMA y I Love Tokyo, y mientras él esperaba para firmar su ejemplar mi amiga y yo fuimos a ver la presentación de Planeta (en mi caso, en parte por la posiblidad de ver a Yerai, al que no conseguí ver). Estuvimos en el encuentro de Wataru Yoshizumi con sus fans, y después de esto nos fuimos. Volvimos a la habitación de los videojuegos para ver si podíamos probar el novísimo Fable III, aunque a mí me pareció, almenos en la parte de moverse por los exteriores, calcado a su predecesor Fable II. Tampoco quise probarlo, porque en un futuro medio-lejano, cuando no cueste los 70 napos que cuesta, me lo compraré.

Cuando nos hubimos cansado vimos un soldado imperial "anunciando" Star Wars: El Poder de la Fuerza II, y gente haciéndose fotos con él. Al principio nos pareció una estatua hasta que se movió. Además, por ahí rondaban un aprendiz de Jedi y uno de Sith, con unos disfraces notablemente currados y con las espádas láser esas tan caras. Total, que fotos al canto.







Después de esto volvimos al sector principal, y volvimos a dar vueltas, hasta que nos sentamos, y finalmente nos fuimos a casa.

En una de las columnas había un cartel tal que:



El lunes (mañana) vuelvo, porque quiero ver si puedo encontrar alguna ganga de última hora, además de ver si puedo regatear en algunas cosas que vi, y de paso a ver si me compro Bakuman y las continuaciones. Si alguien quiere quedar conmigo, que me envíe un mail antes de mañana a: